Y otro nuevo recluta

Y aquí tenéis al amigo de José, del cual os hablé hace unos días. Se llama Marc.

Viene del inefable mundo de Games Workshop, como tantos otros. Su primera adquisición es un cartaginés tardío. El caso de Marc es digno de mención. Lo conocí casualmente en una visita que realizó a Alpha hace más de 6 meses. Si bien sólo vino a mirar, pareció interesado en DBMM. Intercambiamos unos pocos emails pero luego hubo un largo lapso de tiempo en el que no tuve noticias suyas. Estaba seguro que sería uno de los muchos casos de posibles intereses iniciales que al final acaban en nada.

Para mi sorpresa, antes de navidad se volvió a poner en contacto conmigo para adentrarse, esta vez sí, de pleno en el juego. Debo confesar ahora que cuando me contactó de nuevo su nombre me sonaba, pero no fui capaz de recordar su cara, así que no fue hasta que bajó las escaleras de entrada que pude atar cabos cuando quedamos en vernos después de tanto tiempo. Desde entonces, ya se le ve con ganas de dar guerra.

Digo que es un caso digno de mención no por la anécdota de desmemoria por mi parte (cosa que, de forma preocupante, me está sucediendo mucho últimamente), sino por el hecho de que un solo encuentro casual hizo que, muchos meses después, él se volviera a poner en contacto para jugar. A veces pienso cuando hago demos que, de todos los que nunca muestran luego interés, la mayoría no deben ni recordar que han jugado a DBMM. Pero el caso de Marc me demuestra que no, que es posible que, sencillamente, no puedan hacerlo, por el motivo que sea.

En cualquier caso, tenemos otra buena noticia para 2010 con la incorporación de Marc a la comunidad de jugadores.

Bienvenido, Marc.