Gran éxito en Ayudar Jugando. Y segunda parte. Domingo.

Con la voz completamente rota tras un sábado agotador, y tras el inmenso éxito del sábado, el domingo, en el que teóricamente debía seguir haciendo demos, decidí que me concedería un premio a mí mismo y que me dedicaría a jugar de verdad.

Hoy era el día del escenario de la batalla de Rafia. Aprovechando que uno de los participantes previstos no pudo asistir a última hora, me apunté a esta megabatalla espectacular.

Una vez más, los creadores (Toni, los dos Carlos y Ricardo) hicieron un trabajo excelente. La cantidad de minis sobre la mesa fue espectacular. Finalmente, me asignaron el mando del comandante en jefe seléucida, Antíoco III.

No desvelaré aquí el desarrollo de la batalla, que encontraréis con todo lujo de detalles en el blog de Carlos.

Sí que puedo adelantar que me pase la mayor parte de la batalla confundiendo a Antíoco con Antígono, cosa que provocaba la hilaridad de los asistentes.

También puedo adelantar que mi ausencia de experiencia en el manejo de ejércitos helenísticos fue determinante en el desarrollo de la batalla, por decirlo eufemísticamente.

Aun así, fue una gran batalla en un excelente escenario.

He aquí a los vencedores del escenario, que cambiaron brillantemente la historia.

Y aquí los jugadores al completo, entre los que me encuentro yo, como podéis ver :).

Durante el desarrollo del escenario, tres personas más se interesaron por el juego, con lo que se acabó de redondear un gran fin de semana de promoción de DBMM.

El único contrapunto a destacar fue la aparición a última hora, cuando ya estábamos recogiendo los bártulos, del mismo friki que me acompañó en mi primera frustrante presencia en las jornadas de 2007. El tío no sólo se acordaba de mí, sino que me recriminó por el hecho de no haber respondido a ninguno de sus emails (le di uno falso entonces, por supuesto). También me explicó que se presento en el club Kiritik para jugar conmigo pero que allí nadie supo dar explicaciones sobre mí. Aprovecho la ocasión para pedir disculpas a los amigos del club Kritik por haber usado su nombre para hacerme pasar por uno de sus miembros. En esta ocasión le dije que vivo en Zaragoza y que vengo a Barcelona de tanto en tanto para visitar a unos amigos, motivo por el cual tuve que darme de baja de Kritik (disculpas de nuevo a los amigos de Kritik).

Menos mal que no vio mi cartel de presentación del blog…o eso espero.